Las lentes usadas en óptica se pueden dividir en dos grandes grupos:

  • Minerales
  • Orgánicas

Las lentes minerales son las que conocemos de toda la vida como «de cristal», fabricadas con una base de arena de sílice y son históricamente primero se han empezado a usar.

Las lentes orgánicas, son las que se llaman tipo «plástico», aunque realmente no son plásticos al no estar hechas de patróleo o sus derivados.
Dentro de las lentes orgánicas podemos encontrar diversos materiales, como puede ser el clásico CR-39, policarbonatos o MR-8
Hoy en día, los materiales orgánico son los más utilizados, y con mucha diferencia.

Lo que suelen ser ventajas de usar un material, suelen ser desventajas en el otro material, y viceversa.

Las lentes minerales son más pesadas que las orgánicas y si caen pueden romper. Las lentes minerales también son mucho más resistentes al rayado que las orgánicas.

Desde el punto de vista de las lentes orgánicas, éstas son más ligeras, son materiales que en ocasiones se consideran irrompibles (especialmente los policarbonatos) lo que permiten su uso en gafas de seguridad laboral, gafas de protección deportiva, gafas al aire y ranuradas y como es lógico, indispensables en gafas niños. Por desgracia, no son tan resistentes al rayado como las lentes minerales y aunque se les puedas dar un tratamiento endurecido, nunca se acercarán a la resistencia al rayado de las lentes minerales. Y finalmente habrá que señalar que en las lentes minerales podemos encontrar una mayor gama de reducciones que en las lentes orgánicas.

Sobre las lentes orgánicas habrá que decir también que son materiales que aceptan mucho mejor su «dopado», admitiendo mejor tratamientos como pueden ser el tintado para lentes de sol, tratamientos fotocromáticos, de bloque de luz azul o tratamientos ultravioleta.

Respecto a esto último hay que señalar que  el material de las lentes orgánicas ya absorben de por sí, el ultravioleta en muchos rangos rangos, pero a pesar de eso, una lente «de vista» no debe sustituir nunca a una lente solar para una correcta protección a los rayos solares.